Reubicación
Reubicación
Reubicación
Así que contrata en el extranjero. Claro que sí, ¿y quién no? En EE.UU., por ejemplo, el 95% de los empresarios considera que los extranjeros son importantes para su estrategia de captación de talento. Prácticamente todas las empresas europeas (97,5%) tienen equipos internacionales. Pero, ¿está usted contratando bien en el extranjero? ¿Su experiencia de reubicación e incorporación es lo más fluida posible?
Porque considera esto:
- La rotación de personal puede llegar al 50% en el primer año y medio de empleo.
- Sustituir a un empleado puede resultar espectacularmente caro, incluso si no lo traslada desde el extranjero.
- Casi la mitad de los profesionales de RRHH admiten que tienen dificultades para incorporar candidatos internacionales.
- Alguien que se traslada a su empresa ya está sometido a un tremendo estrés por mudarse a un nuevo país. Su primera impresión al trabajar con usted determinará en gran medida toda su experiencia de vida en el extranjero.
A partir de aquí, no hace falta dar un gran salto para afirmar que perder a un empleado extranjero es más fácil y más caro que perder a un empleado local.
A continuación le explicamos cómo trasladar e incorporar con elegancia a un empleado del extranjero sin traumatizarle ni a él ni a usted demasiado.
Familiarícese incómodamente con las políticas de inmigración de su país
Si no es su primer rodeo, ya sabe que reubicar a un extranjero no es algo que se pueda inventar sobre la marcha. El "margen de error" no es un concepto con el que este espacio esté familiarizado.
Dependiendo del lugar desde el que contrate a la persona, trasladarla le supondrá mucho trabajo... o una absoluta tonelada métrica de trabajo.
La preparación, el papeleo y los trámites burocráticos varían enormemente de un país a otro (que trataremos por separado en una próxima serie de artículos), pero hay algunas indicaciones generales que se aplican universalmente:
- Ten mucho cuidado cuando investigues sobre leyes de inmigración. Lo más probable es que encuentres información contradictoria en distintas fuentes, como le ocurrió a una empresa estonia. Porque así funciona el mundo y la burocracia es una pesadilla en todas partes.
- Compruebe dos, tres y cuatro veces su documentación. El más mínimo error puede costarle el éxito de su solicitud de visado. Tener que recurrir una decisión por un error tipográfico probablemente atormentará tus sueños. Así que sea meticuloso y ahórrese un mundo de problemas (y tiempo y recursos).
- Tenga mucha paciencia y tolerancia a la incertidumbre. Incluso las máquinas gubernamentales más eficientes suelen funcionar con lentitud.
No se angustie, desestrese: encuentre un socio de confianza para impulsar su experiencia de traslado e incorporación
Hablando de ahorrar tiempo y recursos...
Hacia la mitad del primer paso, puede que empieces a darte cuenta de que esto te va a doler.
La inmigración de talento es una magnífica pérdida de tiempo. Casi una cuarta parte de los ejecutivos estadounidenses y el 27% de los británicos afirman dedicar 40 horas o más al mes a tareas administrativas y de oficina relacionadas con la movilidad. Cuando se contrata mucho, esto se traduce en un montón de trabajo rompehuesos.
Claro que es gratificante (al final tendrás un nuevo miembro del equipo estupendo). Pero también te hace sentir que, en lugar de marcar la diferencia en tu día a día, siempre estás apagando fuegos.
Para salir del agujero negro de la productividad, sopese sus opciones a la hora de trabajar con un socio de reubicación. Subcontratar las molestias de la inmigración y la reubicación a un socio con la experiencia local adecuada puede acelerar considerablemente la contratación. Por no hablar de la reducción de los niveles de estrés de los sobrecargados equipos de RRHH.
Centrarse en lo correcto
¿Sabe lo que un empleado que se traslada realmente quiere o espera de su experiencia de incorporación? ¿Está concentrando su energía y sus recursos en los elementos adecuados?
Una abrumadora mayoría de los profesionales encuestados en EE.UU. y el Reino Unido afirman que esperan que su empresa les ayude con su traslado. En concreto, esperan:
- Indemnizaciones en metálico;
- Ayuda a la vivienda;
- Coordinación de seguros;
- Apoyo del cónyuge y la familia.
Esto puede parecer bastante obvio, pero resulta que los expatriados también quieren relacionarse y socializar. Más de dos tercios de los expatriados encuestados por InterNations afirman que no se les ofreció este tipo de apoyo cuando se trasladaron, pero que les habría gustado. Por otra parte, las clases de idiomas y la formación intercultural se consideraron menos útiles.
Si todavía no está seguro de lo que quieren sus empleados internacionales, pregúnteles. Encueste a sus empleados expatriados y averigüe qué les gustó y qué no les gustó de su experiencia de traslado e incorporación.
Cuando sepa qué formas de apoyo tienen el mayor impacto, estará preparado para diseñar el paquete de reubicación más eficiente posible. Lo que, a su vez, aumentará las probabilidades de que sus empleados se queden más tiempo.
Ser el primer hilo de su red de apoyo
Algunos dicen que una mudanza es tan estresante como un divorcio. Otros dicen que es incluso más estresante que eso. Sea cual sea su clasificación exacta, es bastante agotador. Si pierde de vista este hecho, estará perjudicando a su nuevo empleado y a usted mismo.
Acaban de desarraigar su vida y ahora, al menos durante algún tiempo, probablemente seas la única red de apoyo que tienen. Comprueba cómo está tu nuevo expatriado. Hazles saber que te preocupas por ellos... espera, preocupándote de verdad (la gente se da cuenta). Cuando compartan sus preocupaciones, ofrézcales soluciones. Presénteles a las personas adecuadas cuando su experiencia personal se agote.
Pero también establece límites. No puedes estar ahí para todo el mundo el 100% del tiempo. Y si intentas estarlo, te quemarás más rápido de lo que puedes decir "Oh no, creo que me estoy quemando".
Asegúrese de que los nuevos empleados sepan qué pueden esperar de usted y cuándo. Establezca normas básicas sobre lo que constituye una emergencia. Si se quedan fuera de su apartamento a medianoche, ¿es usted la persona a la que deben llamar? Si no es así, asegúrese de que lo sepan.
Este es otro buen momento para plantearse buscar ayuda externa. Desde ver apartamentos hasta encontrar un médico, las diligencias se acumulan. Un socio de reubicación como Jobbatical puede quitarle parte del peso de encima cuando ayude a su nuevo empleado a instalarse.
Dependiendo del tipo de apoyo que quiera ofrecer a sus contratados, puede ahorrarse otro buen trozo de tiempo confiándolo a un experto.